«Pero la otra vida está aquí.
Sí, allá esta aquí,
la otra realidad es el mundo de todos los días.
En el centro de este mundo de todos los días centellea,
como el vidrio roto entre el polvo
y la basura del patio trasero de la casa,
la revelación del mundo de allá.
¿Qué revelación?
No hay nada que ver,
nada que decir: todo es alusión,
seña secreta.
Estamos en una de las esquinas del cuarto de los ecos,
todo nos hace signos y todo se calla y se oculta.
No, no hay nada que decir»
Octavio Paz.